La gestión de la reputación de una empresa es clave para su éxito. Una buena reputación consigue mejores cotizaciones en bolsa, atrae y fideliza mejor al talento, apoya e impulsa la internacionalización de la empresa, logra generar ciclos de prescripción y repetición de compra o uso entre los clientes. Por el contrario, una mala reputación produce una pérdida de confianza en los productos y servicios, descapitaliza la empresa, genera rechazo, etc. En este sentido, la implementación de un sistema de gestión del riesgo reputacional se verá recompensado al conseguir identificar oportunidades de mejora, extender y compartir la responsabilidad sobre su gestión, generar un histórico de riesgos y establecer una correlación con el resto de los riesgos corporativos de la organización. En el siguiente curso nos acercamos al concepto de reputación y repasamos las principales métricas, además, de valorar la importancia de las herramientas de gestión como los mapas reputacionales o los cuadros de mando. Formadora: Blanca Hernanz